sábado, 18 de octubre de 2008

Curiosidades sobre femeninos...


Según el DRAE, la palabra RATO presenta las siguientes acepciones:


rato1.
(Del lat. ratus, confirmado).
V.
matrimonio rato

rato2.
(Del lat. raptus, part. pas. de rapĕre, arrebatar).
1. m. Espacio de tiempo, especialmente cuando es corto. Estuve esperando un rato. Voy a descansar un rato. Un rato de conversación. El rato del estudio.
2. m. Gusto o disgusto pasajeros. Pasó un BUEN rato. Me has dado un MAL rato.
buen ~.
1. m. coloq. Mucha o gran cantidad de algo.
~s perdidos.
1. m. pl. Aquellos en que uno se ve libre de ocupaciones obligatorias y puede dedicarse a otros quehaceres y tareas. Estudiaba a ratos perdidos.
a cada ~.
1. loc. adv. A cada momento, con gran frecuencia.
al poco ~, al ~, a poco ~.
1. locs. advs. Poco después, al poco tiempo.
a ~s.
1. loc. adv. de rato en rato.
2. loc. adv. a veces.
de ~ en ~.
1. loc. adv. Con algunas intermisiones de tiempo.
para ~.
1. loc. adv. Por mucho tiempo, generalmente referido a lo venidero, y a veces a aquello cuya realización no parece probable. Si esperas que el asunto se resuelva, tienes para rato. Eso va para rato.
pasar el ~.
1. loc. verb. coloq. Ocupar un espacio de tiempo generalmente con algún entretenimiento.
un ~, o un ~ largo.
1. locs. advs. coloqs. mucho (‖ con abundancia). Sabe un rato largo de geografía. Eso es un rato difícil.


rato3.
(De rata1).
1. m. ratón (‖ mamífero roedor).
2. m. Macho de la rata1.


La curiosidad se centra en la tercera y última acepción. El diccionario le da el significado de ¨macho de la rata¨ cuando más bien, pensábamos que se trataba de un sustantivo epiceno. Lo que sucede es que esta palabra no es muy comercial en nuestro medio, pero que para sorpresa mía también lo asume como válida.


Además del ejemplo anterior hay cierta incertidumbre a la hora de determinar el femenino de algunos sustantivos, así que trataré de clasificarlos y escribir algunos ejemplos para su mejor entendimiento.



Por un lado están los sustantivos típicos cuyo femenino no representa mayor problema para su formación simplemente variando la terminación de la terminación masculina por la femenina. Así por ejemplo, el femenino de gato sería gata, perro(a), león(a), tigre(sa), etc. Incluso ahora incorporaremos la forma RATO (macho de la rata). Preocupante sería pues determinar el macho de LA POTA, prefiero ahorrarme el comentario, puesto que este sustantivo femenino se tratará más adelante.


Sin embargo, la situación de torna un tanto diferente cuando queremos determinar el femenino de TORO, caeríamos en un grave gazapo si lo asumimos como en los ejemplos anteriores. En este caso, la formación de los femeninos cambia radicalmente respecto de su forma; por eso lo llamaremos sustantivos femeninos heterónimos, esto es, tienen diferente nombre, por ejemplo, el femenino de TORO es VACA, el de caballo, yegua; tiburon, tintorera; rinoceronte, abada, etcétera.


Y si queremos determinar el femenino de cóndor, acaso diremos; la cóndor, la condoresa o talvez, la señora cóndor. No, no y no. Aquí se determina el femenino especificando el género de la especie. Estamos claramente ante un caso de sustantivos EPICENOS. Así tenemos que, el femenino de CÓNDOR es CÓNDOR HEMBRA y el masculino CÓNDOR MACHO. Pero surge otra pregunta ¿Cómo de decir? ¿La cóndor hembra o el cóndor hembra?

El sustantivo cóndor es de naturaleza masculina, así que se prefiere la última forma.

Ah lo olvidaba, aquí debe incluirse el masculino de POTA. Uffffff menos mal.


También tenemos los sustantivos ¨comunes a dos¨ que son aquellos que comparten ambos artículos, de esta manera tenemos. El periodista o la periodista, el mártir o la mártir, el joven o la joven.


Finalmente tenemos los sustantivos DISTINGüENDOS que varían de significado dependiendo de qué artículo los encabeza. Por ejemplo, si al sustantivo PAPA le anteponemos el artículo

¨el¨ tendrá que ver con la autoridad religiosa -el sumo pontífice- para ser exactos. Sin embargo, si le anteponemos el femenino ¨la¨ se refiere pues al tubérculo o planta. Otro caso podría ser el de CAPITAL: El capital (dinero, bienes, aportes dinerarios), La capital (ciudad más importante de un país). Esto es todo por hoy....

martes, 14 de octubre de 2008

La envidia ¿siempre negativa?


¿Existe una sola envidia?


En "lato sensu" existen dos tipos de envidia: una buena y otra mala.


Obviamente que el meollo de esta pregunta es dilucidar a qué se refiere esa envidia buena. La Academia reconoce a la palabra EMULACIÓN, el deseo honesto, el propósito de sobrepasar las acciones ajenas. Es decir, ÉMULO (adjetivo) es el rival, el que contiende con otro y quiere superarlo. En definitiva, el sentimiento que nos impulsa a competir con otro. En sentido positivo, es favorable para la virtud.


Por otro lado, la verdadera envidia - en sentido negativo- es pues, el disgusto, la tristeza que nos produce el bien del otro. Es considerar un mal nuestro, el bien del otro.


Finalmente, ¿Existe alguna diferencia entre la envidia y los celos?. En efecto, en los celos se inserta la envidia pero con un matiz distinto: En la envidia yo tengo un pesar que yo no tengo pero que el otro sí lo tiene. En el punto de los celos, yo tengo el bien -o creo tenerlo- pero deseo tenerlo totalmente.


En el gráfico figura la imagen de cómo los antiguos representaban a la envidia: con una cabeza llena de serpientes y una mirada funesta y torcida. Ella era hija del gigante Palas y de la laguna Estigia.

lunes, 13 de octubre de 2008

¿Qué hora es? o ¿Qué horas son?


Siempre ha surgido entre nosotros esa incertidumbre a la hora de preguntar el tiempo. lo cierto es que debemos procurar siempre acercarnos a la verdad. Es por eso que trataré de aclarar este punto.


Lo primero: La hora siempre se determina en un momento preciso de la realidad, esto es, que cada vez que preguntamos aquello queremos saber cuál es la hora en ese preciso momento, por lo tanto la pregunta debería ser siempre en singular: ¿Qué hora es?


Segundo: La regla exige que para contestar se debe hacer siempre en plural: Son las 5 de la tarde, son las 6, 7, etcétera, salvo que esta regla se quebranta en el caso de la 1 pm. en e cual se contesta en singular: Son la una de la tarde, por ejemplo.


¿Hasta que hora se considera la tarde?.... hasta las 7 pm. Siete de la tarde.

jueves, 9 de octubre de 2008

Elogio de la Madrastra




Sin lugar a dudas, una de las novelas que más me ha llamado la atención. Del gran Maestro Mario Vargas Llosa se debe esta notable narración que por momentos nos hace salir del común de nuestros eventos cotidianos. Personajes entrañables se quedan prendados en nuestra mente como arquetipos de la perversión y la inocencia, de conductas sacadas de un contexto real.







Una novela en la cual, las transgresiones incipientemente exploradas por algunos escritores considerados 'malditos', no podrían ser ignoradas por el común de la gente.







Cómo no recordar a Fonchito, un niño de aproximadamente 8 años, el cuál se nos presenta como un ser aparentemente inocente, casi como un querubín, cachetón, chapeado y de hermosos rizos rubios que en ocasiones nos hacen dudar de su aparente bondad y nos dejan abierta la posibilidad de su maldad diabólica y malintencionada; a lo largo de diferentes momentos de la narración no adentramos en las perversiones de la madrastra, la cuál a lo largo de la historia parece ser una pervertida, y al final nos damos cuenta de que realmente era la víctima, de que todo era un plan del niño para separarla de su padre.







Rigoberto, el padre, es una persona común, un personaje fundamental, que con sus abluciones iniciaba cada ritual de su vida. Trataba de encontrar la felicidad, al lado de su esposa Lucrecia a quien adoraba en demasía y con la que disfruta el placer que le genera su belleza. Rigoberto 'Dumbito' es un hombre dedicado al trabajo como hombre de negocios, amante de la pintura, de la música y sobretodo de la vida.

Adjunto archivo.

http://www.filebam.com/download/70399-725951/Mario Vargas Llosa - Elogio de la Madrastra.doc





viernes, 3 de octubre de 2008

LO MEJOR DE LA POESÍA

El hermano ausente en la cena pascual
Abraham Valdelomar

La misma mesa antigua y holgada, de nogal
y sobre ella la misma blancura del mantel
y los cuadros de caza de anónimo pincel
y la oscura alacena, todo, todo está igual...

Hay un sitio vacío en la mesa hacia el cual
mi madre tiende a veces su mirada de miel
y se musita el nombre del ausente; pero él
hoy no vendrá a sentarse en la mesa pascual.

La misma criada pone, sin dejarse sentir,
la suculenta vianda y el plácido manjar;
pero hoy no hay alegría ni el afán de reír
que animaran antaño la cena familiar;

y mi madre que acaso algo quiere decir,
ve el lugar del ausente y se pone a llorar..


La niña de Guatemala
José Martí

Quiero, a la sombra de un ala,
contar este cuento en flor:
la niña de Guatemala,
la que se murió de amor.

Eran de lirios los ramos;
y las orlas de reseda
y de jazmín; la enterramos
en una caja de seda...

Ella dio al desmemoriado
una almohadilla de olor;
él volvió, volvió casado;
ella se murió de amor.

Iban cargándola en andas
obispos y embajadores;
detrás iba el pueblo en tandas,
todo cargado de flores...

Ella, por volverlo a ver,
salió a verlo al mirador;
él volvió con su mujer,
ella se murió de amor.

Como de bronce candente,
al beso de despedida,
era su frente —¡la frente
que más he amado en mi vida!...

Se entró de tarde en el río,
la sacó muerta el doctor;
dicen que murió de frío,
yo sé que murió de amor.

Allí, en la bóveda helada,
la pusieron en dos bancos:
besé su mano afilada,
besé sus zapatos blancos.

Callado, al oscurecer,
me llamó el enterrador;
nunca más he vuelto a ver
a la que murió de amor.

Haz clic (play)para escucharlas.



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